Los bull terrier miniatura son perros alegres, joviales y muy enérgicos. Son tercos y persistentes en el logro de la meta. Con una educación incorrecta, pueden ser agresivos y belicosos.

 

Allá por el siglo XIX, los criadores ingleses comenzaron a notar que en la camada de bull terrier ordinarios se encontraban cachorros más pequeños, pero no le dieron mucha importancia a esto.

Más tarde, ya en el siglo XX, resultó que los bull terrier más pequeños eran excelentes cazadores de ratas, se las arreglaban mucho mejor con los roedores que sus grandes camaradas. Entonces, en la década de 1930, comenzó la cría activa de bull terriers en miniatura.

Para reducir el tamaño de los perros, se cruzaron con terriers toy, pero el resultado no fue muy exitoso: los perros perdieron sus cualidades cazadoras.

 

Después de unos años, los criadores volvieron a interesarse por los minitoros y comenzaron los trabajos de selección. Desde 1963, estos perros recibieron el derecho a participar en exhibiciones y el estándar final de la raza se adoptó en 1991.

 

A pesar de su pequeño tamaño, el bull terrier miniatura no puede llamarse un perro toy. Este es un perro valiente, valiente e incluso peligroso. Al igual que su compañero más grande, el minibull tiene una mandíbula enorme, un buen agarre y un carácter valiente.

Por lo tanto, necesita socialización y entrenamiento tempranos, lo cual es deseable realizar con un adiestrador de perros profesional, especialmente si no tiene experiencia en la crianza de un perro. Sin el entrenamiento adecuado, el minibull puede volverse agresivo, enojado y celoso.

 

Los representantes de esta raza son muy activos, les encantan los deportes conjuntos y los ejercicios de búsqueda con el dueño. Este es un amigo devoto y fiel que seguirá a su "líder" a todas partes. Debo decir que estas mascotas no toleran la soledad y, por lo tanto, es imposible dejarlas solas por mucho tiempo: el carácter del perro puede deteriorarse por el anhelo.

 

Los Mini Bull Terriers son juguetones y casi siempre están de buen humor. El perro siente sutilmente el estado de ánimo del dueño y tratará de animarlo de todas las formas posibles. Por cierto, a minibull le encantan los elogios y el cariño. Se debe usar una golosina como recompensa durante el entrenamiento.

 

El Bull Terrier miniatura es amigable con los niños, pero los niños definitivamente se les debería explicar las reglas de comportamiento con un perro. Su comunicación debe tener lugar solo bajo la supervisión de adultos.

 

Con otras mascotas, el minibull encuentra rápidamente un lenguaje común, especialmente si crece rodeado de compañeros mayores. Pero en la calle, un perro no siempre puede contenerse: los instintos de caza y la agresión hacia los animales más pequeños afloran.
 

 

El Bull Terrier Miniatura es fácil de cuidar. Basta con limpiar el pelo corto de la mascota con una toalla húmeda o simplemente con la mano una vez a la semana. En el cuidado de un perro se debe prestar especial atención a la salud de los ojos, los oídos y los dientes .

 

Lo más importante para mantener un bull terrier en miniatura son las caminatas largas y frecuentes, incluidos los juegos activos y las carreras. Este perro se sentirá muy bien en un apartamento de la ciudad, sujeto a suficiente actividad física.

De lo contrario, el mini perro dirigirá la energía en una dirección diferente, y los muebles, el papel tapiz y las pertenencias personales de los miembros de la familia serán atacados.